Archive for 19 febrero 2015
Un busto de Adriano sale a la luz
El busto del emperador y una pieza pequeña que podría representar a su esposa divinizada han sido hallados en el yacimiento de Los Torrejones, en Yecla
El busto de Adriano preparado para su exposición en el Museo Arqueológico de Yecla. © MUSEO ARQUEOLÓGICO DE YECLA / LIBORIO RUIZ MOLINA
Fuente: Alec Forssman | NATIONAL GEOGRAPHIC
El magnífico busto de mármol que representa al emperador Adriano, hallado el pasado 3 de noviembre en el yacimiento romano de Los Torrejones, ya está expuesto de forma permanente en el Museo Arqueológico de Yecla (MAYE), al norte de la Región de Murcia. Hasta el próximo 15 de marzo se están realizando visitas guiadas para conocer la pieza y los días 23 de febrero, 2 y 9 de marzo se ofrecerá, además, una charla-coloquio sobre su descubrimiento a cargo de Liborio Ruiz Molina, director del MAYE y de las excavaciones arqueológicas en Los Torrejones, una antigua villa rústica romana.
El busto de Adriano emerge de la tierra en el yacimiento de Los Torrejones (Yecla). © MUSEO ARQUEOLÓGICO DE YECLA / LIBORIO RUIZ MOLINA
El busto, en muy buen estado de conservación, ha sido identificado con el emperador Adriano (76-138 d.C.), quien probablemente nació en Itálica, en la provincia de Sevilla. Sabemos que representa al emperador Adriano por la forma o tratamiento rizado del cabello, dispuesto en bandas onduladas y adquiriendo un aspecto de aureola en la zona de la frente. El tratamiento del rostro barbado también le da una personalidad propia al retrato
, explica Ruiz Molina a este medio. La pieza ha sido fechada en el año 135 d.C., es decir, tres años antes de la muerte del emperador. Para ello hemos tenido en cuenta el busto que se exhibe en el Museo Arqueológico de Sevilla, muy parecido al de Yecla. Representa, por tanto, a Adriano con unos 59 ó 60 años de edad, en puertas de la senectud. Una cardiopatía isquémica parece ser que acabó con su vida cuando se encontraba en su villa de Bayas, en Italia
, añade.
Traslado del busto de Adriano una vez descubierto. © MUSEO ARQUEOLÓGICO DE YECLA / LIBORIO RUIZ MOLINA
El hallazgo fue una grata visita inesperada
, expresa Ruiz Molina. El busto apareció durante la excavación de un edificio de grandes dimensiones relacionado con el uso del agua, por lo que probablemente debió formar parte de su decoración. Los arqueólogos también han encontrado una cabeza femenina pequeña de mármol y otras piezas fragmentadas de este mismo material. En principio hemos identificado esta pieza con una venus y cabe la posibilidad de que represente a Vibia Sabina, la esposa divinizada de Adriano
, concluye.
El busto apareció durante la excavación de un edificio de grandes dimensiones relacionado con el uso del agua. © MUSEO ARQUEOLÓGICO DE YECLA / LIBORIO RUIZ MOLINA
Hallan la villa del general romano Mesala, el enemigo de Ben Hur
- Era conocida como Villa Le Grotte y se encuentra en la isla de Elba
- Pertenecía a un importante general romano que también ejerció como orador y mecenas
- Las inscripciones de las tinajas de vino han sido determinantes para averiguar de quién era propiedad este complejo, prácticamente arrasado por el fuego a finales del siglo I d.C.
Stephen Boyd en en el papel de Mesala en la película Ben Hur (1959).
Fuente: LIDIA GÓMEZ | EL MUNDO 19/02/2015
Una de las villas del archienemigo de Ben Hur, Marco Valerio Mesala Corvino, ha sido identificada partiendo de unas antiguas tinajas de vino en la Toscana. Lo cierto es que los arqueólogos habían sospechado durante mucho tiempo que dicha villa situada en la isla toscana de Elba habría sido en el pasado la residencia del general Mesala, pero no habían encontrado hasta el momento suficientes evidencias que pudieran respaldar a ciencia cierta esta hipótesis.
Sin embargo, un equipo de investigadores ha encontrado recientemente un dolium con varias marcas o señales que lo relacionarían directamente con este general romano. Este objeto era un tipo de vasija muy popular en la antigua Roma, de tamaño considerable y utilizada para almacenar y transportar bebida y alimentos. Se estima que muchas de estas tinajas podrían llegar a albergar entre 1.000 -1.500 litros de vino.
El sorprendente descubrimiento se produjo mientras un equipo de arqueólogos -entre los que se encontraba el especialista en metodología arqueológica Franco Cambi– excavaba un área situada en las proximidades de la antigua villa romana. Según apuntan las evidencias encontradas, parece ser que había una finca muy cercana a la villa de cuyos alimentos se servían los inquilinos de la impresionante propiedad del general Mesala.
La elegante construcción era conocida como Villa Le Grotte. La mayor parte de Villa Le Grotte fue destruida al final del siglo I, a causa de un gran incendio. Sin embargo, sobrevivieron a la destrucción algunos objetos hechos de arcilla o barro, entre ellos las tinajas antes citadas.
Al hilo de ello, cabe recalcar que uno de los hallazgos determinantes para esclarecer si la villa pertenecía a Mesala fue la inscripción que aparecía en muchas de las tinas de vino encontradas: «Hermia Va(leri) (M)arci s(ervus) fecit«. Su significado -«hecho por Hermias»- no dejaría lugar a dudas, puesto que Hermias habría sido uno de los esclavos de Mesala. En otra estampa aparece un delfín tallado junto a las letras h y e, en alusión de nuevo a Hermias.
Política y arte en la vida de un audaz general romano
Ben Hur fue un personaje de ficción creado por Lewis Wallace, también conocido como Lew Wallace, en su novela Ben Hur: una historia de los tiempos de Cristo (Ben-Hur: a tale of Christ, en inglés original). La obra fue publicada en 1880 y narra el enfrentamiento entre Ben Hur y Mesala y fue llevada a la gran pantalla en 1959, con Charlton Heston en el papel del aguerrido Ben Hur y Stephen Boyd en el del general Mesala.
Al contrario que Ben Hur, Mesala no era un personaje ficticio: había nacido en el año 64 a.C. en una de las familias romanas más antiguas e influyentes de la época. Además, su nombre ya había estado unido en el pasado reciente a otros hallazgos arqueológicos de notable importancia.
En el verano de 2012 se encontraron evidencias de gran valor en una villa de su propiedad en la capital italiana, entre las que destacaba un impresionante conjunto escultórico que representaba el mito griego de Níobe, el cual Ovidio plasmó en Las metamorfosis. Algunos estudiosos apuntaron que quizá habría podido ser el propio Ovidio quien sugirió a Mesala la colocación de las estatuas, aunque la veracidad o no de esta hipótesis aún sigue siendo un enigma.
Una de las estatuas halladas en 2012 en la villa romana de Marco Valerio Mesala, en Ciampino (Roma). | National Geographic.
De lo que no cabe duda es de que Marco Valerio Mesala Corvino fue un personaje influyente en la sociedad romana de la época, debido a su prestigio como general y a su perspicacia y agudeza como orador. Asimismo, su defensa de la cultura y su papel como protector de diversos personajes destacados de las letras romanas, como Ovidio, Tibulo o Propercio, también fueron aspectos determinantes para comprender su figura y le valieron fama de erudito.
El ancestro de las lenguas indoeuropeas surgió hace 6.000 años en la estepa rusa
Utilizando datos de más de 150 idiomas, lingüistas de la Universidad de Berkeley proporcionan evidencias de que se originó entre Moldavia y Ucrania
Gráfico de las lenguas indoeuropeas del «Dictionary of the English Language» (imagen ampliada)
Fuente: EP | ABC 19/02/2015
Que lenguas como el inglés, el griego o el hindi, conocidas como «lenguas indoeuropeas«, provienen de una familia de lenguas que surgieron de un ancestro común ya había sido aceptado por los lingüistas. Ahora, un nuevo estudio nos da más información sobre cuándo y dónde surgió esa lengua primaria.
Utilizando datos de más de 150 idiomas, lingüistas de la Universidad de California, Berkeley, proporcionan evidencias de que esta lengua ancestral se originó hace entre 5.500 y 6.500 años en la zona comprendida entre Moldavia y Ucrania, pasando por el sur de Rusia y el oeste de Kazajistán.
Un artículo que aparecerá en la edición de marzo de la revista académica «Language» ofrece un nuevo soporte para la «hipótesis de la estepa» o «hipótesis Kurgan», que propone que las lenguas indoeuropeas primero se propagaron con la evolución cultural de la cría de animales alrededor de hace 4.500 a 3.500 a.C.
Los autores de este artículo titulado «El análisis filogenético de ascendencia limitada apoya la hipótesis de la estepa indoeuropea» (Will Chang, Chundra Cathcart, David Hall y Andrew Garrett) examinaron más de 200 juegos de palabras de lenguas indoeuropeas vivas y muertas.
Después de determinar la rapidez con que estas palabras cambiaron con el tiempo a través de modelos estadísticos, concluyeron que la tasa de cambio indica que las lenguas que primero utilizaron estas palabras comenzaron a divergir hace aproximadamente 6.500 años, de acuerdo con la hipótesis de la estepa.
Este es uno de los primeros trabajos académicos basados cuantitativamente en apoyo de la hipótesis de la estepa y, además, el primero en utilizar un modelo con «limitaciones de ascendencia», las cuales incorporan de manera más directa las relaciones previamente descubiertas entre las lenguas. En futuras investigaciones, métodos de este estudio podrían utilizarse para estudiar el origen de otras familias lingüísticas, como la afro-asiática y la chino-tibetano.
La mañana en que César conquistó Ategua… hace hoy 2.050 años
La antigua ciudad romana de Ategua coronó a Julio César ‘imperator’ el 19 de febrero del año 45 antes de Cristo | Una ruta recordará la hazaña el próximo sábado
Vista aérea de Ategua | JAVIER GÓMEZ
Fuente: ALFONSO ALBA | CORDÓPOLIS 19/02/2015
La mañana del 19 de febrero del año 45 antes de Cristo, Julio César cruzó el arroyo Montalba para acceder a la ciudad romana de Ategua. Ese día, del que hoy se cumplen 2.050 años, César sería nombrado Imperator. Ategua se había rendido en la que suponía la penúltima batalla de la Guerra Civil entre César y Pompeyo que cambió el mundo: entre el imperio, que nacía con César, y la República, que moría con Pompeyo. Y fue en Ategua, hace ahora 2.050 años. Y casi nadie se acuerda, salvo la Asociación de Amigos de Ategua que este sábado organizan una marcha senderista con visita incluida al yacimiento arqueológico más desconocido, y quizás de los más importantes, de Córdoba.
Esa mañana de febrero de hace 2.050 años, César cruzó un puente que recientemente ha sido restaurado. El puente, de un solo un arco, está realizado con dovelas partidas que se alternan con otras enteras, una técnica constructiva que se repite en numerosos puentes, tanto de Hispania como de la Península Itálica y que se viene fechando en los últimos años de la República, si bien es un sistema constructivo que se mantiene también en los primeros años de la época augusta. Y allí sigue.
César, que daba la Guerra Civil por vencida, había viajado de Roma a Córdoba por que la ciudad se había rebelado. Dos hijos de Pompeyo, Gneo y Sexto, se habían hecho fuertes en una ciudad que entonces se calculaba que tenía 14.000 habitantes. En enero, asumiendo que no podría conquistar Córdoba, César ordenó a sus legiones que rodearan Ategua por una sola razón: sus ingentes reservas de grano, que alimentarían a sus hambrientos soldados. La ciudad, habitada desde la época ibera, tenía entonces 9.000 habitantes. Su cerco duró un mes.
Ante el poderío militar de las legiones de César, los comandantes de Ategua entregaron la ciudad aquella mañana del 19 de febrero al que pasaría a ser conocido como el nuevo Imperator. Todavía quedaba una última batalla en Munda, donde los hijos de Pompeyo y sobre todo la República de Roma sería finalmente derrotada. En Munda, un lugar en el centro de Andalucía que aún está por descubrir, cambiaría el mundo entonces conocido, y su sistema político.
Este sábado, la Asociación de Amigos de Ategua recordará, 2.050 años después, uno de los hechos históricos más importantes para la historia mundial de todos los acontecidos en la provincia de Córdoba. A las 8.00 de la mañana, unas 300 personas saldrán desde la plaza Santa Teresa de Jornet, junto al puente del Arenal, para completar una ruta de 20 kilómetros. Harán un camino similar al de las legiones de César, que también entre enero y febrero recorrieron los 20 kilómetros que separan Córdoba de Ategua.
Los Amigos de Ategua llegarán al yacimiento arqueológico (del que apenas se ha excavado el 5% y sobre el que hay mucho por descubrir aún) sobre las 13.30. A esa, visitarán el yacimiento, la colina sobre la que César divisó Córdoba y fue coronado Imperator.
Puente de acceso a Ategua que usó César para conquistar la ciudad | ALEJANDRO IBÁÑEZ